martes, 28 de octubre de 2008

No quería repetir, pero un hilo de sangre ya le caía por la comisura

No quería repetir, pero un hilo de sangre ya le caía por la comisura. Siempre ocurría igual. Todo empezaba con una charla inocente, él se ajustaba las gafas en un gesto tímido, ella lo encontraban adorable. De un modo otro siempre acababan en el piso de ella. El último café, la última copa, algo de música… Él fingía una torpeza que le era impropia y ella reafirmaba su autoridad controlando la situación en su propio territorio. El poder nos vuelve tan insensatos… De modo que ella marca el paso, ambos intiman y él pierde el control.

Había vuelto a manchar el pantalón por la excitación. Se secó la boca con el dorso de la mano y contuvo las nauseas hasta que dio con el baño. Se desnudó después de vomitar y una vez dentro de la ducha abrió el grifo del agua caliente, sin importarle lo más mínimo escaldarse bajo el vapor. Se frotó furioso, intentando arrancarse el sudor y el arrepentimiento de la piel, a tiras así fuera la única forma.

Se secó con la primera toalla que encontró, mirando de vez en cuando al cuerpo desmadejado que yacía sobre la cama. La rutina que se había grabado a fuego en la mente se abrió paso entre la niebla de su pensamiento.

Ir a la cocina, guantes, lejía, limpiar todo lo que hubiera tocado, verter al menos la mitad de la botella de lejía en el plato de la ducha y en el váter. Colocar un cuchillo en la mano de la chica, ampliar la herida del cuello y masajear el corazón para simular una hemorragia en la herida post-mortem. Cuando la encontraran sería un suicidio entre otros.

- Te estoy aburriendo- La voz de la chica le sacó de su ensimismamiento.

La miró con esos ojillos tímidos mientras se subía las gafas.

- No, perdona. Te pareceré un estúpido, pero por un momento estaba tan a gusto que no me di cuenta de que no estaba sólo.- De forma inconsciente usaba palabras con muchas ese y erres suaves, de tal forma que transmitía una sensación de sosiego a su interlocutora,- Bueno, así dicho en voz alta si que suena bastante a delirio.
- A mí me suena bastante tierno. –Le tocó levemente los dedos de la mano derecha- ¿Qué te parece si subimos a mi piso a tomar la última copa y me cuentas en que estabas pensando?
- De acuerdo. –Sonrió al borde del sonrojo de nuevo.- Pero sólo era un dejá vu.

10 comentarios:

Laura Luna dijo...

Buen retrato de un psicópata sexual, el clásico que parece no haber roto un plato en su vida y que a sus espaldas hay vajillas enteras destrozadas. Es un argumento que te puede dar más para este relato corto. Y tú tienes bastante talento para profundizar más en esta idea ;)
Un beso ensangrentado,
Mun

Anónimo dijo...

Jo, terrible tio. Juegas con nosotros de una manera fabulosa. Primero nos haces creer que la ha matado, nos metes en el psicología del personaje (muy bien ahí) y luego nos dices que no, que fue uan ensoñación, para al final dejarnos con el horror ante la certeza de lo que va suceder.

Muy bueno.

Un saludo,


Pedro.

samantha dijo...

OMG!!! jeje me gusta :)

Rebeca Gonzalo dijo...

Me has dejado sin palabras. Parece matarla, luego me desconcierta averiguar que no y nuevamente me aterro al descubrir que sólo has pospuesto lo que en realidad va a suceder en cuestión de minutos, como mucho de horas. ¡Genial!

Pugliesino dijo...

Como nos vas presentando la timidez del personaje,dándonos esa imagen o mejor dicho haciéndonos caer en esa "trampa" para luego desvelarnos bruscamente y a la vez con sutil delicadeza quien se halla bajo esa timidez.Luego con el final nos abres la puerta a la imaginación mas... ufff puede abarcar desde una romántica noche otoñal a la más terrorífica...
Muy bueno Cuervo. Un abrazo

Sara dijo...

Muy delicado, jugando al despiste, dejando caer las ideas... como alguien ha dicho por ahí arriba, es una idea muy interesante para profundizar en ella ;)

María José dijo...

Vaya, llegué a pensar en la segunda parte que con ella iba a hacer una excepción pero ya veo que no, el dejá vu lo confirma.
Muy buena historia y muy bien relatada.

Miguel González Aranda dijo...

Me ha gustado mucho este relato. En pocas palabra juegas girando y descolocándonos...
muy bueno.

salud

tangas usadas dijo...
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Anónimo dijo...

podria escribir un comentario serio y bueno como los que ya hay, pero yo no se hacer eso.solo se que me gusta como escribes y lo que escribes :D

por cierto, era este el relato que tenia que leer? recuerdame que cuando hablemos te haga un encarguito :D
bss